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NO trates de dejar el azúcar, mejor aprende a relacionarte con ella.
Los dulces parecen tentaciones difíciles de resistir, pero la falta de fuerza de voluntad NO siempre es la culpable cuando deseamos un “dulcesito después del almuerzo, heladito los domingos, y postre con la comida”.
Recuerda que consumir azúcar libera dopamina ( Un neurotransmisor que activa un mecanismo cerebral que se llama circuito de recompensa, lo cual hace que tendamos a repetir una y otra vez comportamientos y consumos en busca de esa sensación)
La triste verdad es que la mayoría de las personas comen mucho más azúcar de lo que creen, esto se debe al alto consumo de ultraprocesados, alimentos en donde el azúcar es utilizada para conservar, dar color y textura; Por eso un aspecto clave para reducir el consumo de azúcar es optar por las opciones más naturales, mínimamente procesadas y en lo posible preparadas en casa.
Es normal pensar que el azúcar solo se encuentra en alimentos de sabor dulce, pero la verdad es que es muy común que haya azúcares agregados en productos salados como la salsa de tomate, los panes y aderezos para ensaladas. Piensa en esto: Nunca agregarias azúcar intencionalmente sobre tu ensalada, pero es posible que lo hagas sin saberlo .
Recuerda que los azúcares naturales (el tipo bueno de azúcar) se encuentran en alimentos como la fruta y los carbohidratos complejos, estos tienen muchas vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, en cambio los azúcares añadidos (que deberías evitar) son generalmente refinados y sustitutos del azúcar que NO proporcionan ningún valor nutricional, son solo calorías vacías.
Por otro lado es muy importante aprender a identificar el azúcar “escondida”. Por más fit, light o saludable que parezca la etiqueta, SIEMPRE debes leer muy bien la lista de ingredientes, ten en cuenta que están organizados en orden de mayor a menor concentración, y recuerda que el azúcar puede tener muchos otros nombres (Sacarosa, Dextrosa, Glucosa, Lactosa, Rafinosa, Maltosa, Maltodextrina, Jarabe de glucosa, Jarabe de maíz rico en fructosa, Jarabe de caramelo, Jarabe de maíz).
Además es fundamental que revises si hay una relación entre tus emociones y tu deseo por comer dulce. Muchas veces usamos el azúcar para camuflar lo que realmente estamos sintiendo, esto puede hacernos mucho daño porque las emociones que no gestionamos se puden ir acumulando y convertirse en heridas profundas que cada vez serán mas difíciles de sanar.
¿Te ha pasado que cuando restringes algo al final terminas deseandolo mucho más? Por favor NO trates de dejar el azúcar, mejor aprende a relacionarte con ella, consumela en la justa medida, con consciencia y SIN CULPA.
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